Cómo comer con palillos es algo que todo el mundo se cuestiona porque pocos saben cogerlos correctamente. Pero eso va a cambiar porque te vamos a enseñar a hacerlo. Sigue leyendo…
Disfrutas de la gastronomía oriental, pero todavía tienes que recurrir al clásico tenedor porque no controlas los palillos. La mayoría de nosotros no sabe cómo cogerlos correctamente. Pero no te preocupes, eso va a cambiar, ¡solo hay que pillarle el punto! ¿Quieres aprender cómo comer con palillos? ¡Pues apunta, porque tiene truco!
Paso a paso para colocar los palillos correctamente
El truco está en saber colocar los palillos. Te lo explicamos paso a paso:
- Levantaremos la mano que vayamos a utilizar, según seamos zurdos o diestros.
- El primer palillo lo colocaremos debajo del pulgar, haciendo que descanse en la palma de la mano. Pero, ¡ojo! el palillo no debe tocar el pulgar, debes sentir que el palillo está firme, pero sin tensar los dedos.
- A continuación, cogeremos el segundo palillo que ira entre el pulgar y el índice.
Para saber si lo estamos haciendo correctamente, los palillos quedarán paralelos y el extremo inferior estará sostenido por la yema del pulgar y el extremo superior por la yema del índice.
- Doblaremos los dedos anular y meñique y apoyaremos el palillo inferior sobre el dedo anular.
- Pondremos el dedo corazón debajo del palillo superior, moviendo el segundo palillo de arriba abajo. El palillo inferior quedará fijo.
Además de aprender a como colocarlos, para saber cómo comer con palillos hay que prestar atención a estos detalles:
- Debes introducir la comida directamente en la boca y nunca apoyar los palillos en los labios ni mucho menos mordisquearlos, se considera de mala educación.
- Entre bocado y bocado los palillos se dejan en el reposapalillos, que se colocará al lado del bowl.
- No los dejes nunca cruzados sobre la mesa o sobre el reposapalillos. En la cultura oriental se considera una grave falta de respeto, hay que dejarlos siempre en paralelo.
¡Y a practicar! Porque saber cómo comer con palillos requiere de práctica, paciencia y muchas risas.
Historia y diferentes formas de los palillos
Ya que estamos hablando de cómo comer con palillos, no está de más conocer la historia de esta tradición y las diferentes formas de los palillos, según el país.
Según explica el historiador Eduard Wang estos existen en China desde el siglo IV a.C., pero no fue hasta el siglo X a.C. cuando los chinos empezaron a compartir platos de comida alrededor de una mesa y por ese motivo los palillos chinos se tuvieron que alargar, para poder alcanzar la comida con más facilidad.
Los palillos japoneses en cambio son más cortos y acaban en punta. Esta forma les facilita poder quitar las espinas del pescado, un alimento que siempre ha formado parte de su dieta básica.
Por último, los palillos coreanos están hechos de metal. La razón es que los líderes y gobernantes creyeron en su día que así evitarían ser envenenados, pensaban que, al estar estos hechos de plata, esta detectaría el veneno. Y pasado el tiempo, allí todos los palillos acabaron elaborándose en este material tan característico.
Beneficios nutricionales de comer con palillos
Como curiosidad también os damos varias razones por las que saber cómo comer con palillos también aporta beneficios nutricionales. Hay publicaciones que respaldan la idea de que comer con palillos tiene consecuencias ventajosas con independencia de nuestros factores genéticos.
No es casualidad que la mayoría de los japoneses estén delgados, aunque la base de su dieta sea el arroz, que posee un alto contenido en almidón.
Aunque este planteamiento parezca simplista, algunas publicaciones científicas como The American Journal of Clinical Nutrition señalan algunos motivos por los que comer de forma consciente tiene ventajas nutricionales, entre ellas destacamos las siguientes:
- Exige más concentración. Ponemos el foco en lo que estamos haciendo y esto evita las prisas y las malas digestiones, obligándonos a comer más despacio y de manera más responsable.
- Masticamos más y digerimos mejor, además nos obliga a comer más despacio con lo cual tragamos menos aire al ingerir. Al haber menos cantidad de aire en el estómago, este se contrae y nos saciamos antes.
Como podéis observar intentar aprender a comer con palillos puede ser una aventura no solo gastronómica si no también muy beneficiosa para nuestra salud. Desde Tareca os animamos a practicar, ¡ahora ya sabemos cómo!
Tareca, Vending que te hace feliz