Cómo preparar zumo de tomate y llenarte de una fuente importante de vitaminas A y C, vitamina K y vitaminas del complejo B.
El zumo o jugo de tomate es uno de los más populares y consumidos a nivel mundial. Aunque en la zona del Mediterráneo sintamos una lógica preferencia por los cítricos, y en especial por el zumo de naranja, merece la pena que le hagamos un hueco en nuestro menú si queremos aprovecharnos de sus muchas propiedades y disfrutar del supersabor de este gran alimento.
Hacer zumo de tomate paso a paso
Antes de contarte cómo preparar zumo de tomate queremos hablar de sus beneficios. El zumo de tomate es una importante fuente de vitaminas A y C, vitamina K y vitaminas del complejo B. Además de aportar al organismo gran cantidad de minerales como hierro, calcio, sodio, potasio, magnesio y fósforo.
Es un antioxidante muy potente, ayuda en el proceso de digestión, contribuye a la reducción del colesterol y es muy recomendable en la prevención de enfermedades cardíacas.
También se le reconocen propiedades desintoxicantes y múltiples beneficios para el pelo y la piel, especialmente en los casos de pieles deshidratadas, con sobreexposición al sol o con problemas de acné, exceso de sebo o puntos negros.
A todo ello se suma que es una opción muy saludable, refrescante, deliciosa de la que, además, podemos disfrutar todo el año.
¿Cómo preparar zumo de tomate? El zumo de tomate es sencillo y rápido de preparar en cualquier momento del día. Puede convertirse en un perfecto aperitivo, es ideal como acompañamiento de un almuerzo o como entrante en cualquier menú.
Pero no podemos olvidar que la mejor forma de beneficiarse de todas las propiedades del zumo de tomate es prepararlo con tomates frescos. Así que, te animamos a seguir esta sencilla receta y descubrir por ti mismo cual es tu versión favorita o cual es la mejor forma de servirlo para ti y para toda la familia.
Ingredientes:
- 15 tomates bien maduros, preferiblemente de pera o en rama, aunque puedes probar con otras variedades y elegir en función del nivel de acidez o dulzor que prefieras.
- Unas hojas de albahaca fresca.
- Perejil fresco.
- Aceite de oliva virgen extra.
- Sal.
- Pimienta .
- Zumo de limón (opcional).
Para hacer el jugo de tomate comienza por lavar bien los tomates y meterlos en la nevera el tiempo suficiente para que se enfríen. Te resultará más fácil pelarlos y además podrás tomarlo nada más prepararlo y disfrutar mejor de su sabor.
Una vez que estén listos, pela todos los tomates, pártelos y quítales las semillas.
Pasa los tomates por la licuadora o bien utiliza una batidora hasta conseguir un puré muy fino. Si ha quedo muy espeso, puedes añadirle un poco de agua mineral (fría)para aclararlo a tu gusto. Si buscas una textura perfecta y delicada siempre puedes colarlo o pasarlo por el chino.
Después, añade una pizca de albahaca y perejil frescos y bate de nuevo hasta que quede todo perfectamente integrado.
Otros ingredientes a añadir en el zumo de tomate
Para darle el toque final a tu jugo de tomate añade sal y pimienta al gusto, junto con un poco de jugo de limón, que le dará un sabor delicioso a esta refrescante bebida.
Algunas recetas añaden apio para darle un toque de frescura, que también puedes utilizar para decorarlo. Si eres atrevido, también puedes darle un toque picante añadiendo cayena, tabasco o paprika. Pero hazlo poco a poco y con cuidado de no excederte y arruinar el sabor auténtico del tomate.
Si después de esta explicación de cómo hacer zumo de tomate aún no te hemos convencido para que te lances sin demora a prepararlo en casa, solo nos queda recordarte que esta deliciosa bebida tiene un muy bajo contenido en calorías, ya que por cada 180 ml que tomemos solo estaremos sumando 31 calorías a nuestra dieta.
Además, no tiene grasas saturadas ni poli-insaturadas, por lo que sus niveles de grasa total son mínimos que resulta un perfecto aliado si, además de mantener una dieta saludable, quieres perder peso.
Tareca, vending que te hace feliz